Hoy he tenido una interesante conversación con mi mujer sobre la felicidad. Muchos piensan que la felicidad es no tener problemas, despertarse por la mañana y que el día transcurra sin sobresaltos. Temerosos de que que pase algo. Por ello cuando nos sobreviene un problema decimos: ¡Qué mala suerte! cuando no palabras más contundentes. Pero no ... los problemas son parte de la vida, como las soluciones. Esto no significa que queramos tener problemas sino que los problemas debemos tomarlos como algo natural de nuestra existencia y angustiarnos porque puedan aparecer nos hace infelices, luego lo más lógico es puesto que no vamos a poder evitarlos, los que vienen sin avisar, hagamos que formen parte natural de nuestras vidas y pongámonos manos a la obra para superarlos. Además son una oportunidad para aprender. Por eso digo que los problemas son una oportunidad para evolucionar. Hay que hacer de lo negativo algo positivo. No nos sintamos infelices por algo que es natural. Afrontemos los problemas con resolución. Aceptemos el reto de superarlos.
Que razón tienes. Hay un libro de Mª Jesus Álava Reyes, La inutilidad del sufrimiento, que viene a decir algo parecido. Hay culturas, paises, sociedades, donde la gente tiene grandes problemas, catastrofes... y las personas no pierden la sonrisa, porque al fin y al cabo como dices, los problemas siempre están ahí, pero depende del enfoque que les demos, podemos ser más o menos felices.
ResponderEliminarUn saludo
Un saludo Pingüina.
ResponderEliminarEs un buen consejo que me da muchos ánimos; gracias CPM!
ResponderEliminarMe alegra que te sirva. Creo que son de esas cosas que hay que compartir porque nos ayudan a seguir luchando. Un abrazo.
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